Estos remedios caseros mejoran significativamente la duración y calidad del sueño.
El insomnio es de los trastornos más comunes a la hora de dormir y provoca dificultad para conciliar el sueño o dormir durante la noche. Este trastorno del sueño conlleva consecuencias negativas durante el día, como fatiga, dificultad para concentrarse, problemas de memoria, irritabilidad y reducción del rendimiento en las actividades diarias. Por eso, siempre estamos buscando nuevas soluciones útiles o remedios caseros para combatir eficazmente esta enfermedad.
A lo largo de los años, varias investigaciones han intentado revelar las causas de este problema y se puede decir que el insomnio tiene diferentes orígenes abarcando factores como el estrés, problemas de salud mental, cambios en el ambiente para dormir, uso de estimulantes y ciertas condiciones médicas.
El último estudio sobre la salud mental en argentina realizado por el Observatorio de Psicología Social de la Facultad de Psicología de la Universidad (UBA) arrojó datos preocupantes en materia de salud mental. Esto se debe a que el 75,95% de los argentinos admitió sufrir algún tipo de trastorno del sueño.
Los datos obtenidos por los expertos de OPSA indicaron que de estos 75,95%, el 38,61% refirió insomnio o interrupción del sueño, el 21,39% durmió menos de lo habitual y el 15,95% durmió más de lo habitual.
Dormir es tan importante para nuestro cuerpo como comer o respirar, afirman los expertos, por lo que ante el insomnio es necesario implementar diferentes hábitos que se puedan integrar a la rutina.
Aunque existen muchos medicamentos para tratar el insomnio, algunas personas prefieren explorar remedios naturales. Afortunadamente, existen varias opciones efectivas. Aquí exploramos cinco opciones populares. Si bien estos remedios no funcionan para todos, generalmente es seguro probarlos y pueden incorporarse fácilmente a una rutina antes de acostarse para acabar con esta afección.
Los remedios caseros más populares para tratar el insomnio:
1. Té de manzanilla
El té de manzanilla es un remedio popular conocido por sus efectos sedantes, lo que lo convierte en un remedio natural para promover un sueño reparador. Contiene antioxidantes como la apigenina, que se unen a receptores en el cerebro que pueden ayudar a inducir la relajación y mejorar la calidad del sueño.
Este efecto calmante también puede ayudar a reducir la ansiedad y el estrés, contribuyendo así a una transición más tranquila al sueño. Beber una taza caliente de té de manzanilla antes de acostarse puede ser un ritual reconfortante que promueve una sensación de tranquilidad y prepara el cuerpo y la mente para un buen sueño nocturno.
2. Raíz de valeriana
La raíz de valeriana es conocida por su capacidad para mejorar la calidad del sueño, reducir el tiempo que lleva conciliar el sueño y aliviar la ansiedad en algunas personas. Sin embargo, su efectividad varía.
Algunas investigaciones realizadas por la revista Well Being indican poco o ningún impacto con el uso regular. Es posible que deba experimentar para encontrar la dosis y la frecuencia adecuadas para obtener resultados óptimos.
3. Aceite de lavanda
El aceite de lavanda es utilizado comúnmente para mejorar la relajación y la calidad del sueño.
Varios estudios sugieren que puede beneficiar a personas que sufren de insomnio, ansiedad o depresión al ayudar a aumentar la duración del sueño profundo de ondas lentas.
4. Magnesio
El magnesio es un mineral vital que promueve la relajación muscular y la reducción del estrés.
Se ha relacionado con la promoción de hábitos de sueño saludables, lo que puede explicar por qué los participantes en un estudio de 2012 experimentaron una mejor calidad del sueño y reducción en los síntomas de insomnio después de tomar magnesio durante un par de meses.
